En California, los propietarios tienen la obligación legal de garantizar que su propiedad sea segura para los huéspedes. Cuando los propietarios no reconocen ni reparan los peligros potenciales de los que eran o deberían haber sido conscientes, las víctimas que sufren lesiones tienen derecho a solicitar una indemnización por los daños sufridos. Aunque la persona lesionada no haya sido invitada a entrar en la propiedad, y por tanto haya entrado sin autorización, el propietario puede ser responsable si sus acciones constituyen negligencia. La responsabilidad del propietario por los daños sufridos dependerá de si actuó o no con diligencia razonable en relación con la previsibilidad de un riesgo.
Atractivos molestos y responsabilidad por los daños causados en los locales
En general, en California la ley no requiere que un individuo sea un invitado para que pueda invocar la responsabilidad del propietario cuando se lesionan en la propiedad de otro. Esto se extiende a los niños que sufren una lesión en una propiedad que técnicamente han traspasado. Esto es particularmente común cuando hay una molestia atractiva.
Una molestia atractiva es una condición en la propiedad de una persona que puede atraer a los niños que no son capaces de apreciar el peligro inherente de la condición. Estos objetos, como piscinas, camas elásticas, estanques artificiales, tractores y otros equipos, pueden parecer tentadores para los niños, que pueden no comprender el peligro potencial que suponen para la seguridad. Por lo tanto, incluso cuando un niño entra sin autorización, si se lesiona o muere a causa de una molestia atractiva, el propietario puede ser considerado responsable.
Prueba de la responsabilidad del propietario
Para invocar la responsabilidad del propietario cuando un niño ha resultado lesionado a causa de una molestia atractiva, es necesario demostrar que el propietario del inmueble no puso un cuidado razonable en mantener su propiedad en condiciones de seguridad en relación con la previsibilidad del riesgo.
Los siguientes factores pueden ser útiles para demostrar la responsabilidad:
- Si el propietario sabía o debería haber sabido que era probable que un niño entrara en su propiedad.
- Si el propietario conocía o debería haber conocido la existencia de una situación peligrosa y el riesgo que suponía para las personas que se encontraban en la propiedad, como los niños.
- Si el niño lesionado debería haber comprendido o no los riesgos asociados a la condición peligrosa.
- Si el dueño de la propiedad podía haber arreglado razonablemente la condición peligrosa.
- Que la carga que supondría para el propietario eliminar el riesgo es menor en comparación con el riesgo potencial que supone para los niños que puedan entrar en la propiedad.
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